Conocemos a la escritora Macarena Márquez

Macarena Márquez Bueno (Jerez de la Frontera, 1991) es profesora de Educación Secundaria y Bachillerato, Licenciada en Bellas Artes, en la especialidad de Conservación y Restauración de Bienes Culturales, y posee un Máster en Investigación y Análisis del Flamenco.

¿Qué especialidad trabajas? Relato corto, novela, poesía…

Realmente no me encasillo en ningún área concreta, ya que considero la literatura un vehículo de expresión más, a veces puedo tener la necesidad de expresarme o de plasmar una idea a través de un género y otras veces empleando otro. Si bien es cierto que lo que más he producido durante mi vida ha sido poesía, el hecho de cursar una formación académica que requiere entre otras cuestiones como el estudio, la redacción de artículos de investigación, me ha supuesto la apertura hacia otros géneros como el ensayo, o en última instancia la narrativa.

 ¿Desde cuándo escribes? ¿Qué te motivó a hacerlo?

Comencé a escribir en mi infancia, quizás inspirada por la belleza tan palpable de la poesía de ciertos autores como Rafael Alberti, Gloria Fuertes, o Federico García Lorca, creo que eran fuentes muy accesibles y cercanas para una niña de doce o trece años. Recuerdo el día exacto en que escribí mi primer poema, estaba en clase, días antes acababa de fallecer mi abuela paterna y necesitaba expresar el dolor contenido en medio del silencio del aula. Creo que a raíz de aquella experiencia elegí la escritura como medio para expresar y canalizar mis emociones.

¿Has publicado alguna vez un libro? Indícanos los títulos y una breve sinopsis.

Curiosamente las dos publicaciones las he lanzado en 2023. Parece un año que me ha servido de comodín en el ámbito literario, al haber conseguido alcanzar la meta con la que llevaba años fantaseando por duplicado. El primero de ellos, se titula “El CADF, una institución pública andaluza para la investigación del Flamenco: historia y perspectivas”, en él he documentado y recopilado la historia y evolución del único centro existente para la conservación y difusión del Flamenco, el cual se encuentra en Jerez de la Frontera. La segunda publicación es un poemario, “Un ramillete de Jaramagos” representa la gran ilusión que siempre he tenido, un poemario que define bastante mi actual forma de ver la vida, entre sus páginas se pueden apreciar descripciones de lugares, personas o vivencias retratadas desde una óptica serena y positiva.

¿Qué medios utilizas para que los lectores puedan estar al día de todos tus proyectos? ¿Dónde recibes más interacción?

Principalmente empleo las redes sociales, que son las más ágiles a la hora de transmitir la información utilizo Facebook e Instagram. En esta última red es en la que recibo una interacción mayor e instantánea. No obstante, me gusta escribir artículos de investigación o noticias sobre las publicaciones en mi blog personal, de reciente creación, pues ha sido este mismo año cuando lo he configurado, considero que el blog es un medio más atemporal y organizado, asimismo, me permite una mayor profundización en los temas que suelo tratar. Con el blog persigo precisamente, promocionar un conocimiento mayor sobre el flamenco, la historia, el arte, o el patrimonio, siempre desde mi experiencia personal dado el amor que profeso a estos ámbitos de la cultura.  

Recuerdo el día exacto en que escribí mi primer poema, estaba en clase, días antes acababa de fallecer mi abuela paterna y necesitaba expresar el dolor contenido en medio del silencio del aula. Creo que a raíz de aquella experiencia elegí la escritura como medio para expresar y canalizar mis emociones.

Portada del libro “El CADF, una institución pública andaluza para la investigación del Flamenco: historia y perspectivas” de la autora.

Tenemos entendido que estás trabajando en otro libro. ¿Podrías adelantarnos algo?

En este momento, me encuentro escribiendo una novela, llevo unas 130 páginas, se trata de una biografía con algunos tintes ficticios, pero basada puramente en el vivo retrato de una mujer del Siglo XXI. No puedo adelantaros mucho, pero será un personaje que sorprenderá y se hará querer a través de sus vivencias particulares, su singular carácter y su evolución en el proceso vital. Durante este proceso estoy disfrutando muchísimo ya que manejo entrevistas de primera mano, tanto con la protagonista como con otros personajes imprescindibles de la trama, esto conlleva a veces pasar de la risa a la lágrima, aunque predomina lo primero, por la cantidad de anécdotas. Estoy recibiendo muchos aportes, especialmente al narrar experiencias que corresponden a otros periodos de nuestra historia reciente.

Gracias a la novela, estoy realizando una inmersión personal tremenda, he llevado a cabo descubrimientos relacionados con mi propia historia familiar y establecido contacto con personas cuyo parentesco desconocía hasta la fecha. Todo ello, me ha permitido inclusive acercarme a lugares tales como viviendas, calles, iglesias… Que antes pasaban desapercibidos para mí, pero que ahora sé que forman parte de la historia legada por generaciones anteriores.

¿Es fácil ser escritor/a? ¿Cuánto tiempo te lleva escribir una obra?

Si es fácil o no, lo tengo claro. Te respondo que: se es escritor o no se es, la cualidad de serlo va implícita en la persona. Lo mismo pienso de otras áreas del arte o la creación. Distinta es la proyección o el alcance del que goce el autor, esto último si puede ser complicado. La escritura conlleva bastante tiempo, por ejemplo, para la cantidad de páginas escritas hasta la fecha de la novela en la que me encuentro inmersa, puedo haber empleado unos cuatro meses. Como puede verse, es una carrera de fondo. En cambio la poesía es algo diferente, pues es espontánea, en esto no puedo decir el tiempo que has de emplear, más bien, el tiempo que has de vivir, porque es con las vivencias que tienes con las que te surge la inspiración para expresar emociones.

Portada del libro “Un ramillete de Jaramagos” de Macarena Márquez.

¿Recibes mensajes de agradecimiento de personas que leen tus obras?

Lo cierto es que recibo mensajes de afecto y aprecio sobre mi obra, algo que verdaderamente me gratifica y reconforta como creadora de contenido gráfico o literario. Como ejemplo, puedo traer al presente a una seguidora a la que conocí por Instagram, a la que también admiro, ella se dedica al diseño de moda, y comenta con frecuencia mis publicaciones. También recuerdo con especial cariño a la tía de una buena amiga, que suele comentar mis poemas con entusiasmo. Pienso que este feedback es muy importante para los escritores, ya que de los lectores recibes ese empuje, compensación, o ánimo para seguir compartiendo ese lado íntimo, personal, que plasmamos a través de las palabras.

¿Algún dato curioso sobre ti?

Pues cambiando de faceta, tras terminar la carrera, pasé un periodo de algo más de dos años trabajando para una empresa especializada en el ámbito de la conservación y restauración de obras de arte, “S&S restauraciones”. Durante ese tiempo trabajé junto a dos enormes profesionales a las que guardo mucho cariño, Cristina Espejo y Pepa Segura. Aprendí muchísimo durante ese periodo y tuve la suerte de participar en la restauración de diversas obras pictóricas de la Catedral de San Salvador de Jerez de la Frontera, colaborando en la restauración de pinturas de gran relevancia histórica como el “San Jerónimo en meditación” o el “Martirio de San Caralampio”, entre otras, del pintor jerezano Juan Rodríguez, el “Tahonero”. Dichos lienzos se encuentran expuestos en la citada Iglesia-Catedral y pueden contemplarse durante su horario de visita. Es una experiencia que disfruté muchísimo y que siempre tendré en mi recuerdo.

Instagram: @macarenamárquez_escritora

Facebook: Macarena Márquez

macarenamarquez-escritora.blogspot.com