Entrevista a la artista plástica y escritora Miriam de Juana
- by MundoArti
- 25/07/2019
Miriam de Juana (Madrid, 25 de marzo de 1983), terminó sus estudios de Bellas Artes en la Universidad Complutense de Madrid (UCM) en 2007, y seguidamente realizó un curso de adaptación pedagógica en la Universidad de Alcalá de Henares (UAH) en 2008. Tras su formación, comenzó a asumir trabajos temporales que le permitieron alternar trabajos artísticos con mejor remunerados. Gracias a esto, pudo comprar materiales y seguir adelante con sus cuadros.
Da difusión a su obra a través de numerosas redes sociales y otras actividades: cuenta con su propio canal de Youtube, Facebook, Instagram y Blogger; publica relatos ilustrados en BUBOK; escribe artículos para la revista de arte Revistar; publica poemarios en formato ebook en la Casa del Libro; y se presenta a concursos de pintura, ilustración y literatura para continuar invirtiendo en formación, difusión y materiales.
A día de hoy sigue trabajando incansablemente para permanecer en el mundo de la cultura, pero, sobre todo, para que más personas puedan seguir soñando con sus obras surrealistas.
Háblanos de tu formación. ¿qué ha supuesto para ti?
Para mí aprobar el examen de entrada a bellas artes supuso la mayor satisfacción a nivel académico que he tenido, era como un sueño cumplido. Para entrar en bellas artes además de la nota de selectividad tienes que aprobar un examen de entrada que consta de dos partes, el encaje de una figura y su interpretación. Yo nunca había trabajado en un papel de un metro por setenta centímetros hasta que no me presenté al examen. También tengo que reconocer que no aprobé a la primera, tuve que presentarme tres veces hasta que lo logré.
Una vez dentro de la Universidad Complutense de Bellas Artes descubrí que el arte sí es capaz de envolverlo todo, clases llenas de caballetes y lienzos, gente tallando piedra en el patio, salas de videoarte con ordenadores que tenían los últimos programas de edición. Aún puedo oír música en las clases de grabado…
Todos los profesores que tuve durante la carrera nos aportaron al alumnado en general y a mí en particular, mucho conocimiento, de todos ellos he aprendido algo. Tenían en común inculcarnos la voluntad de superación, siempre se puede mejorar, siempre se le puede dar una vuelta de tuerca a una idea.
Una de las cosas que más nos ha gustado de tu obra, es la versatilidad en temáticas, colores y formas. Eso sí, hemos notado una especial apreciación por trabajar la mujer y la naturaleza, ¿estamos en lo cierto? ¿son tus temáticas favoritas? ¿por qué?
Procuro cambiar los enfoques de la obra, buscar imágenes diferentes entre otras cosas para no aburrirme, pero es cierto que cuando me dejo llevar por el subconsciente acabo agarrándome a pintar formas naturales con rostros femeninos como un mantra que se repite. Siempre pienso en la madre naturaleza como una mujer integrada en el paisaje, una fuente de fuerza y sabiduría, una madre que protege un mundo natural y a la vez salvaje.
Exactamente qué efecto deseas provocar en el espectador cuando ve tus obras. ¿Invitarle a la reflexión o simplemente hacerle viajar a tu mundo interior?
Ninguna de las dos cosas, no suelo tratar los temas para que el espectador llegue a la misma conclusión que yo en mi obra, quiero que ellos interpreten. Tampoco les muestro mi mundo interior para que se sientan identificados. El cometido de mi obra es devolverles a los espectadores a un sueño, esa sensación por la mañana cuando te despiertas y sabes que has soñado algo maravilloso, pero no recuerdas exactamente lo que era, esa es la sensación que quiero transmitir en el espectador. Es la sensación que yo tuve al ver por primera vez en el Museo Reina Sofía un cuadro de Dalí. Y creo que esa magia es personal e intransferible, no hay que dirigir al espectador, ellos suelen ver más cosas en tu obra que tu misma.
Hemos visto que has expuesto con frecuencia, ¿Crees que te ha beneficiado como artista? ¿Cuál fue tu mejor experiencia?
Todo lo que sea difusión, visibilidad y que te conozcan es importante si crees que tu obra merece la pena, darle visibilidad a tu trabajo es parte de tu trabajo. La profesión de artista es complicada ya que pasas la mitad del tiempo trabajando en solitario y la otra mitad relacionándote para sacar a la luz las obras del taller.
Mi mejor experiencia será estas navidades ya que participo en una exposición colectiva en el Museo Gustavo de Maeztu de Navarra de la mano de la revista de arte Revistart a quien siempre les doy las gracias por ofrecerme exposiciones y dejarme publicar en su revista.
Vemos que combinas tu faceta de pintora con la de escritora. ¿siempre has trabajado ambas artes a la vez? ¿o se dieron de forma simultánea?
La pintura esta en mi vida desde que era niña cuando comenzaba a pintar en blocks que mis padres me compraban, pero la escritura surgió después de la carrera. Empecé a buscar como darle difusión a mi obra y no encontraba nada más que concursos, pregunté en un par de galerías, pero a mí lo que me atraía era que más gente viera los cuadros. Entonces pensé que a la gente les encantan los libros ilustrados “como a mí”, la novela gráfica comenzaba a imponerse como un nuevo medio de lectura y comencé a escribir textos ilustrados que publiqué en BUBOK, una editorial de auto publicación que también me ha dado muchas alegrías. Así comencé a escribir relatos cortos, poemarios ilustrados, incluso tengo un libro solo con ilustraciones a rotulador, también en esta editorial.
Supongo que te lo habrán preguntado muchas veces, pero ¿pero como te sientes más cómoda, escribiendo o pintando?
Me siento cómoda en las dos facetas ya que las utilizo alternativamente, si me bloqueo pintando recurro a la escritura y viceversa, es una manera de no estar parada en ningún momento. El discurso que ofrezco en pintura gira hacia el surrealismo, la naturaleza, los sueños y la magia, hacer que el espectador recupere su imaginación infantil y sueñe. Sin embargo, en la escritura, el discurso es muy diferente, aquí si entra el sentido reflexivo de la vida, la identificación con el lector, esa conexión para hacer que el lector se integre en el relato.
Creo que el arte ayuda a muchas personas a expresarse, es como un lenguaje mudo, un lenguaje de ideas y conceptos encerrados en materiales que favorece la reconciliación con uno mismo.
¿Una de las principales problemáticas a la hora de realizar una obra es la falta de inspiración (sobre todo en el ámbito literario por aquello de la hoja en blanco…) te ha ocurrido alguna vez? En caso afirmativo ¿cómo lo resolviste? ¿qué consejo darías a alguien que está pasando por esa situación?
Es normal que cuando escribes llegue un momento que sin pretenderlo te desconectas de la obra, me suele durar pocos días y vuelvo a retomarlo. Una de las cosas que se puede hacer para evitarlo es no dejar de escribir e incluso coger hojas en blanco y continuar la obra en otro lado, como si estuvieras haciendo un anexo de tu obra. Si es malo lo que escribes lo desechas, pero hay veces que en esos anexos aparecen escenas que te dan pie a continuar con la obra y ese momento es maravilloso, “la musa vuelve a casa”.
Dicen que el arte tiene poder terapéutico. ¿en algún momento de tu vida lo has experimentado?
Creo que el arte ayuda a muchas personas a expresarse, es como un lenguaje mudo, un lenguaje de ideas y conceptos encerrados en materiales que favorece la reconciliación con uno mismo. Sin embargo, en mi caso, no utilizo el arte solo cuando lo necesito, está presente en mi vida a todas horas, vivo encuadrando imágenes de mi día a día buscando aquella belleza extraña que tienen los sueños. Tengo incluso descargada en mi móvil una APP para dibujar cuando no tengo a mano un block. También llevo un bolígrafo, las ideas no hay que dejarlas nunca escaparse porque hay veces que no vuelven a presentarse.
Aproximadamente ¿cuánto sueles tardar en llevar a cabo una obra pictórica? ¿y literaria?
En cuanto a tiempo de trabajo siempre dependerá de la complejidad del proyecto, en pintura el tamaño del lienzo marca mis tiempos, un cuadro de 60x60 cm puedo tardar aproximadamente de una a dos semanas. En cuanto a la literatura si son relatos cortos suelo tardar una semana o dos, pero si hablamos de textos más largos tipo novela corta necesito bastante más tiempo.
¿Estas trabajando ahora en algún proyecto?
Como he mencionado antes estoy pendiente de una exposición colectiva en el Museo Gustavo De Maeztu en Estella (NAVARRA), creo que va ser una exposición increíble e invito a todo el mundo a que acuda a visitarla en diciembre de este año.
Vemos que estas al día en redes sociales ya que cuentas con un canal en Youtube y administras tu propia página en Facebook. Lo que nos ha llamado la atención es que no presentas un perfil en Instagram ¿es por algo concreto? ¿Qué opinas sobre estos medios de difusión? ¿sientes que te han beneficiado?
En realidad, si tengo Instagram, suelo mencionarlo menos porque no hace mucho que me uní a esta red y lo tengo bastante vacío de cosas, pero con el tiempo será un Instagram decente para visitar. Las redes sociales son un trampolín para los desconocidos, músicos que se dan a conocer por YouTube, escritores que comienzan con blogs, (por cierto, también tengo una página en Blogger que está un poco descuidada), artistas que graban como realizan sus obras y las suben a Facebook, es un escaparate increíble donde comprobar que opinan de tu obra y sorprende ver cómo la gente te pone me gustas y frases buenas acerca de lo que haces. A mi tener redes sociales me ha permitido moverme con más rapidez en los campos que a mí me han interesado y encontrar personas afines a mis gustos, proyectos e intereses. De hecho, a MundoArti os conocí por Facebook cosa de la que estoy muy agradecida y felicitaros también a vosotros por un trabajo profesional y riguroso, enhorabuena.