Entrevista a Nicanor García, nos cuenta los secretos de sus fotografías
- by MundoArti
- 04/03/2019
Cuando llevas un poco de tiempo en las redes sociales, es imposible no acabar topándote con alguna foto de Nicanor García. Este fotógrafo barcelonés se ha ganado al gran público (cuenta con más de 730.000 seguidores en su instagram), con su mirada única y personal sobre la arquitectura. Pero hay mucho más allá de un perfil en internet, y en MundoArti hemos tenido la gran oportunidad de descubrirlo.
Buenas tardes Nicanor, cuando leemos tu nombre, pensamos automáticamente en arquitectura ¿Cuándo nació ese interés?, ¿y por la fotografía?
Como personas vivimos y nos relacionamos dentro de y rodeados de arquitectura, y esta supone parte importante de nuestro paisaje cotidiano. En mi caso el interés por la arquitectura en mi fotografía tiene origen en que estudié arquitectura y trabajé como arquitecto. Durante años, mi trabajo era diseñar y construir edificios: desde pequeñas viviendas a escuelas o edificios de oficinas. Entorno a la arquitectura hay muchas revistas y libros especializados que son los que te ayudan a aprender y conocer del trabajo de otros arquitectos. Al ir estudiando fui aprendiendo a ser arquitecto, pero también de los fotógrafos de esos libros y revistas de arquitectura. Al viajar y visitar los edificios que me interesaban empecé a hacer mis propias fotografías y a aprender mejor como realizarlas. Con la crisis de hace unos años, pude dedicarme con mayor intensidad a la fotografía y, poco a poco, fui teniendo más proyectos como fotógrafo y menos trabajo como arquitecto. Llegó un momento que me centré en la fotografía, pero mi interés por la arquitectura, la ciudad, el diseño y todo lo que lo rodea sigue formando parte de lo que hago a diario. De alguna manera siendo fotógrafo ahora sigo aprendiendo como arquitecto a través de la cámara, y mi interés se ha ampliado a otros ámbitos como el viaje, las ciudades o la cultura.
A la hora de hacer una fotografía, ¿qué es lo que te resulta más difícil?
Al realizar una fotografía no puedes sentir que es difícil para no verte bloqueado o limitado. Lo principal es tener interés y curiosidad por lo que estás mirando y fotografiando. Has de intentar que tu mirada y la cámara sean lo mismo, que mirar por el visor no condicione lo que estás viendo. Evidentemente hay una técnica que tienes que aprender, pero con lo básico ya puedes hacer buenas fotografías y explicar lo que ves. Hoy tenemos la suerte que a nivel técnico es muy fácil acceder a libros, tutoriales, foros… u otros fotógrafos. La información técnica está al alcance de todos, lo importante es tener ganas de explicar lo que ves con tus fotografías.
Cuando he tenido que hacer algún trabajo de algún tema que no he realizado antes, miro de prepararlo con antelación. Busco información y ejemplos que me ayuden a valorar si necesito algún tipo de técnica o accesorio concreto. Aunque trabajando en fotografía solo llevo 7 años, he tenido ocasión de hacer diferentes tipos de proyectos y siempre estoy atento a cualquier novedad que pueda ayudarme a resolver situaciones específicas. Pero lo más importante es que disfruto haciendo fotos tanto cuando son para un proyecto, como cuando son simplemente para mi.
Viendo tus fotos, da la sensación de que todo es orgánico y natural, que ese momento preciso estaba esperando a que lo fotografiaras ¿Sueles tardar en encontrar esa foto “perfecta”? ¿En qué te fijas para ello?
Al hacer fotos puedes disparar a lo que resulta obvio, pero si trabajas lo que ves, también puedes mostrar un punto de vista original o inesperado. En cualquier proyecto me gusta empezar por lo que es evidente, lo primero que ves al llegar e intentar aprender de esa visión inicial. A partir de ahí me interesa seguir fotografiando mientras exploro lo que voy viendo, sin prisa, intentando que las fotos que tomo me resuelvan las dudas de lo que veo. Si hay posibilidad, me gusta volver al mismo lugar a una hora diferente, verlo con otra luz, intentar mirar de otras maneras.
En una serie de fotografías de un edificio, un interior o una ciudad, siempre hay alguna que muestra la esencia de lo que viste, la que lo transmite mejor. Si se tratara de un retrato sería la fotografía que explica mejor a esa persona en ese momento y contexto preciso.
Si hiciste esa foto al principio, o después de varias horas, es lo de menos si tienes la suerte de volver con ella en tu cámara.
Como en todas las profesiones artísticas, existe un gran debate con el tema del intrusismo ¿Piensas que la fotografía es una cuestión de formación y técnica o de ponerle ganas y tener visión? ¿Cómo describirías tu caso?
La fotografía es lo más parecido que tenemos a la mirada. De alguna manera nos permite capturar lo que la mirada ve de manera puntual, y eso es fantástico. Por el contrario, no tiene la frescura y agilidad de nuestros ojos, que se pueden mover rapidísimo y adaptarse a la luz inmediatamente. Así pues, tenemos que recortar la distancia entre lo que ve nuestra mirada y la fotografía aprendiendo a como manejar la cámara. Las ganas y la buena visión son fundamentales, pero aprender la técnica fotográfica es muy necesario para que no nos suponga un obstáculo.
En mi caso aprendí fotografía a la vez que aprendía arquitectura. Al hojear libros y revistas de arquitectura me fijaba mucho en la información que nos daban las fotos. Así fui aprendiendo de los espacios, de los materiales, de la luz, de la perspectiva… pero al intentar emular ese tipo de vistas en mis fotos tuve que ir aprendiendo la técnica que hay detrás. La cuestión es que vas aprendiendo poco a poco, a medida que reflexionas a través de las fotos que vas tomando. El fijarte en una serie de fotógrafo te hacer ser crítico con tu propio trabajo. En mi caso Ezra Stoller, Julius Shulman o Francesc Català-Roca, fueron algunos de los fotógrafos clásicos que me ayudaron en mi evolución. Esta bien fijarse en los fotógrafos que están especializados en una disciplina concreta, pero también en los que son versátiles en varias. En el caso de Català-Roca, además de fotografía de arquitectura, también se dedico a la fotografía documental, a los retratos. Ver como resolvía de manera brillante diferentes tipos de fotos es muy didáctico.
En definitiva, la motivación y la reflexión en el propio trabajo, la inspiración en el trabajo de otros fotógrafos y la formación técnica continua son las claves que nos permiten avanzar en fotografía y en mi caso me ayudan cada día.
Viendo tus fotos, se puede ver que has hecho un largo recorrido por el mundo, pero tus fotografías siempre acaban volviendo a Barcelona, ¿en cuál de estos lugares has disfrutado más? ¿por qué?
Cuando pienso en los lugares en los que he estado fotografiando, recuerdo haber disfrutado más en los que he tenido ocasión de volver varias veces. Destacaría Japón, por sus contrastes internos y con nuestra cultura. También la ciudad de Estambul por su topografía, historia y cultura. Cada vez que vuelvo a alguno de estos destinos descubro nuevos lugares que fotografiar que van ampliando lo que conozco. Ese proceso de asimilación a lo largo de diferentes visitas, hace que tu fotografía cada vez sea capaz de ver cada más y mejor.
Quizás por eso mismo disfruto mucho fotografiando en Barcelona, que es de donde soy y vivo. El ver como evoluciona Barcelona a través de la cámara, el visitar diferentes lugares por diferentes motivos, a veces por ocio y otras por algún proyecto, me ayuda a tener una visión más diversa e intensa de mi propia ciudad.
¿En qué te basas a la hora de elegir los destinos?
La mayoría de destinos a los que viajo están vinculados a algún proyecto concreto. He podido colaborar con diferentes oficinas de turismo nacionales como las de Indonesia, Japón, Jordania o Argentina, pero también he realizado trabajos para Lufthansa, Turkish Airlines o Iberia.
En otras ocasiones organizo el viaje por mi cuenta para repetir en alguno de los destinos o explorar alguno nuevo.
¿Hay algún destino que te llame especialmente la atención y al que aún no hayas ido?
No tengo una respuesta muy concreta porque son muchos lugares los que me gustaría descubrir todavía. En toda Asia hay muchos destinos interesantes para visitar, pero India es uno de los que más me gustaría. También Cuba y así conocer de cerca como está cambiando.
Muchos artistas, cuando llevan cierto recorrido, suelen probar diferentes modalidades del mundo del arte ¿Alguna vez te has planteado pasarte a otra disciplina además de la fotografía, como, por ejemplo, el vídeo?
Considero que todavía soy un fotógrafo “joven”, y la fotografía en sí es una disciplina que quiero trabajar con más profundidad y seguir desarrollando pues considero que tiene mucho que aportar por si misma. Por supuesto me interesa el video, pero en principio para incorporarlo como complemento a la fotografía.
¿Qué es lo que más te atrae de la fotografía frente a (esas) otras disciplinas?
Lo que más me atrae e impresiona de la fotografía es su capacidad de síntesis que, en unas pocas imágenes o simplemente una, puedas ser capaz de transmitir y explicar algo que has visto, una emoción. La fotografía siempre deja margen para imaginar y construir nuestra propia versión de una historia que puede coincidir con la historia que vio el fotógrafo, y en otras ocasiones no.
Actualmente, con las redes sociales, internet, los móviles… el mundo de la fotografía está cambiando ¿crees que las nuevas tecnologías van a desplazar al fotógrafo tradicional?
Todas las redes sociales, pero sobre todo Instagram y YouTube, están cambiando la manera de difundir y consumir las fotografías y otros contenidos. En muchos periódicos los reporteros gráficos se han reducido, pero esos fotógrafos han continuado fotografiando ya sea en un contexto u otro. Todo se está reposicionando, pero por ejemplo en mi caso me ha ayudado a entrar de lleno en la fotografía. Las nuevas tecnologías son una oportunidad y pienso que quien genera buen contenido y fotografías siempre tendrá posibilidad de trabajar en ello.
Por último, nos gustaría saber si estás trabajando en algún proyecto o tienes algún plan futuro del que quieras hablarnos.
Para el próximo mes estoy preparando dos viajes, uno a Roma para un proyecto personal y otro a Qatar para una colaboración.
Nicanor es el vivo ejemplo de una persona que se ha reinventado a sí misma, además, nos demuestra que con esfuerzo y perseverancia se puede llegar a cualquier lado.
A nosotros solo nos queda agradecer la gran honestidad con la que ha contestado a las preguntas, es todo un lujo poder conocer un poco más del artista que hay detrás de la obra. Y a los lectores, esperamos que os haya animado a continuar luchando y trabajando para haceros un hueco en el mundo del arte.
También puede que te guste la entrevista que le hemos hecho a Christian Rodríguez: montañero, escritor y fotógrafo