Paula Cabaleiro: “Siempre defino la obra de arte como un artefacto para hacer sentir”
- by Yasmina Zarcos
- 29/06/2017
Entrevistamos a Paula Cabaleiro, artista multidisciplinar, comisaria, crítica de arte y gestora cultural.
Estudió Bellas Artes en la Universidad de Vigo y se especializó en el Máster en Museología, Crítica y Arte Contemporánea de la USC, y en el Máster de Educación de la UVIGO. Desde entonces se ha dedicado en cuerpo y alma al arte.
Entre sus múltiples proyectos, Paula dirige junto a Consuelo Chacón el MAC Fundación Florencio de la Fuente, un pequeño museo en el pueblo de Huete (Cuenca). En 2016, organizaron el concurso fotográfico Huete Photowalk con la intención de atraer a los amantes del arte a su museo y poner en valor al pueblo. Una exitosa primera edición que continúa este año con el segundo encuentro fotográfico.
Desde MundoArti, queremos desearle a esta completísima artista mucho éxito en su extensa trayectoria profesional.
¿Cuándo comenzó tu interés por el arte?
Desde los 6 años pintaba cuadros. Me gustaba experimentar con pinturas, telas, cartones... pero mi pasión por la gestión cultural empezó más tarde; aunque siempre de la mano de la creación. Decidí estudiar Bellas Artes, donde organizaba pequeñas exposiciones con compañeros y compañeras.
Al acabar la licenciatura, el máster en Museología y crítica contemporáneas me descubrió el mundo de los museos, el comisariado y la gestión de proyectos. Es entonces cuando decidí abrir mi propia galería de arte en 2011, junto con una socia. Abandoné (prácticamente) la creación, pero 6 años después mi vida sigue ligada a la creatividad. He realizado ferias de arte, muchas exposiciones, coordinado residencias artísticas, desarrollado congresos, seminarios y talleres, diseñado programas artísticos, impartido conferencias... creo que la gestión, definitivamente, ya es mi mundo. Aunque no lo quisiese.
¿Qué es para ti el arte contemporáneo?
El arte contemporáneo siempre es una posibilidad de crecer, de conocer, de aprender, de abrir tu mente, de sentir, de conocerse a uno/a mismo/a… Siempre defino la obra de arte como un artefacto para hacer sentir, porque el arte genera momentos donde el artista ya no decide, sino que la obra es la que actúa, provoca, sugiere.
El/la artista es un ser sensible, que detecta y canaliza estímulos de la realidad para provocar situaciones donde el espectador vive una experiencia estética. ¿Hay algo más mágico?
¿En qué momento decidiste dedicarte profesionalmente a la gestión cultural?
No lo decidí, o al menos de forma consciente. Simplemente un día me di cuenta de que era gestora y que lo era desde hacía mucho tiempo. La capacidad de gestionar es innata, aunque nunca dejas de aprender, de formarte, de adquirir recursos y estrategias. De errar y de acertar. De reflexionar, evaluar y reaccionar. Un día me di cuenta de que mi valía para difundir la obra de los demás era mayor que mi potencial creativo-artístico. Y me dediqué en cuerpo y alma a ello. Con todo el sacrificio que ello implica, pero también con todas las vivencias (únicas) que ello te aporta.
No obstante, creo que haber emprendido mi propia galería fue clave para llegar a mis proyectos actuales, sin duda. Especialmente por el aprendizaje que conllevaron los errores. Pero como en cualquier reto, quien no arriesga, nunca gana, nunca avanza.
Gestora cultural, comisaria, artista multidisciplinar, crítica de arte... ¿Qué significa para ti cada proyecto artístico en el que participas? ¿Cómo consigues sacarlos adelante?
Muchos de los proyectos nacen de las propias vivencias. Un encuentro con un/a artista, una conversación en una inauguración, un paseo al atardecer… cualquier estímulo puede ser una inspiración. Después ya viene el resto. Necesitas planificar, proyectar, imaginar, conocer, investigar... para llegar a tener un "borrador" de esa idea.
Las instituciones con las que colaboras, los artistas, otros agentes culturales con los que interaccionas... todas las partes que forman parte van a interferir en el proyecto, dando forma, modificando, enriqueciendo la idea. Así, cada proyecto es como un hijo, que alimentas, ves crecer, avanzar, caerse, levantarse... y evolucionar.
Otros proyectos nacen al detectar una necesidad. Una necesidad del propio sistema del arte. Una necesidad social. Una necesidad de la comunidad creadora. O una necesidad de una institución o entidad. Por eso me considero una generadora de vínculos, entre las distintas partes que articulan el propio sistema.
Entre los múltiples proyectos en los que colaboras se encuentra II Huete Photowalk que tuvo lugar el pasado sábado 10 de junio. ¿Qué acogida tuvo? ¿Cuáles son tus impresiones y expectativas?
Desde hace aproximadamente 1 año y medio, dirijo junto a Consuelo Chacón el MAC Fundación Florencio de la Fuente, un pequeño museo nacido a partir de una colección de arte moderno y contemporáneo en un pueblecito de la provincia de Cuenca, Huete. Desde entonces y con mucho esfuerzo compartido con nuestro patronato y nuestros colaboradores, hemos intentado sacar adelante una programación que ponga en valor el papel social y cultural del museo, que atraiga nuevos públicos e impacte en el entorno, enriqueciendo y construyendo la comunidad.
Nuestro Huete Photowalk nacía en 2016 para atraer amantes de la fotografía a nuestro museo y focalizar su atención sobre el gran valor patrimonial, histórico y natural del pueblo. Tras una primera exitosa edición con 95 participantes, no podíamos dejar de repetir esta cita con la intención de fijar este encuentro fotográfico en el panorama nacional. Y así nació la segunda edición.
¿Cómo es organizar un concurso de arte como Huete Photowalk?
Pues no es sólo trabajo mío, obviamente. Consuelo Chacón y yo coordinamos este encuentro, pero contamos con el apoyo y toda la difusión por parte de las personas que constituyen nuestro patronato. Además, el apoyo de la Diputación de Cuenca y la colaboración con la Fundación Antonio Pérez, son fundamentales para el desarrollo de esta jornada. El resultado es un proyecto que ilusiona tanto al equipo organizador como a las personas participantes, como, en definitiva, al pueblo. La población de Huete ve como muchos/as fotógrafos/as invaden las calles con sus objetivos hambrientos de captar las particularidades del entorno. La exposición resultante está cargada de escenas, rostros, edificios, parajes... que todo el pueblo conoce, lo cual siempre genera emoción y curiosidad.
¿Qué medios consideras más efectivos para dar a conocer y promocionar este tipo de eventos artísticos?
La mayor parte de nuestros participantes conocen el concurso a través de las RRSS, medios de comunicación locales, plataformas de difusión nacionales y blogs de fotografías. Lo cierto es que las asociaciones de fotógrafos/as juegan un papel fundamental porque funcionan como eco de todas las propuestas. Cada granito de arena cuenta, cada RT, cada compartir y cada reenviar. Por lo tanto, gracias a todos los medios y las personas que nos ayudáis.
Como profesional del arte, ¿en qué crees que beneficia a los artistas la participación en concursos?
Difundir su obra, conocer a otros/as artistas, conocer lugares e instituciones nuevas... además de los premios que pueden obtener, obviamente. Cada persona que participa suele "reincidir" y volver a la siguiente edición, ese es el mejor balance. Así que seguiremos trabajando para poder convocar muchas más ediciones.
Deseamos que la hayáis disfrutado, también podéis echar un vistazo a la entrevista realizada a Jorge Sala: “El arte te dará emociones inigualables”.